Mis poderes mágicos me pemiten oír ruidos o percatarme de lo que se dice a muchísima distancia.
Mis dueños son Ana e Íñigo, una pareja de abuelos muy joviales y simpáticos que cuidan de su nieta, Lucía, de 4 años.
Lucía es muy divertida, juego con ella al escondite, a las carreras y a ver quién salta más alto.
A lo largo del curso, os enseñaré estrategias de toma de conciencia de la importancia de la comunicación y el saber escuchar, el autocontrol y la resolución de conflictos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario